En 1521, los dirigentes Kaji’ Imox y B’eleje’ K’at fueron electos para gobernar la región de Chi Iximche’. Kaji’ Imox era un guerrero con altas disciplinas, un gran liderezgo y dispuesto a defender a su pueblo. Este héroe, conocido también como Zinacan junto a otros gobernantes, se enfrentaron a la invasión española.
Según indica Guillermo Paz Cárcamo en el libro “Kaji’ Imox La Historia del camino del pueblo Kaqchikel”, los gobernantes nativos lucharon por mantener a salvo la población indígena a inicios de la época colonial.
La tradición oral también es fundamental para transmitir los acontecimientos en donde Kaji’ Imox fue protagonista. De acuerdo a Francisco Xocop, anciano kaqchikel de 94 años, Kaji’ Imox y B’eleje’ K’at fueron grandes autoridades y los primeros que llegaron al pueblo Chi’xot, lo que hoy es San Juan Comalapa (Chi’xot significa comal) después de la invasión española.
Un día Kaji’ Imox dijo a sus compañeros guerreros que iba a bajar un cerro porque sabía que él manejaba mucha energía, y pidieron permiso a Rajab’al Juyu para que cayera una montaña sobre los invasores, donde murieron varios de ellos.
Cuando los españoles se percataron de este hecho, los dejaron libres por un tiempo. Escaparon a las montañas en búsqueda de lugares estratégicos ya que en la región hay múltiples barrancos dónde ocultarse.
Al paso del tiempo, Kaji’ Imox fue sacrificado por los invasores. Quien asumió el poder después de este hecho sangriento fue B’eleje’ K’at. Autoridades ancestrales motivan a que estas anécdotas se narren en las escuelas de la comunidad, ya que actualmente, sólo es contada por los ancianos a través de la tradición oral.