La directora es Evelyn Prince y el actor Marcelo Solares.

‘Nada, yo soy Adán’ es una confesión y al mismo tiempo el recuento de una vida dedicada a la rebeldía y a la resistencia. Es un poema escénico que celebra la libertad, la diversidad y la fuerza. Es, como lo dice su intérprete, “el resumen del universo”, un universo tan cercano como desconocido. La dramaturgia combina texto, coreografía y espacio para encontrar nuevos caminos a la experiencia teatral en Guatemala.

Ese montaje surge de un programa de residencias de creación del Centro Cultural de España realizado en plena pandemia.