A través de un gesto que inició hace alrededor de 20 años, la familia Ralda concedió al Estado de Guatemala el terreno donde se asienta el sitio arqueológico Tak’alik’ Ab’aj, Retalhuleu, para que sea gestionado por el Ministerio de Cultura y Deportes. Como parte del reconocimiento a la acción de esta familia, el martes 14 de febrero se realizó el Cambio de la Rosa de la Paz, el cual fue presidido por el Ministro de Cultura y Deportes, José Luis Chea Urruela.
El Cambio de la Rosa fue realizado por el señor José Luis Ralda González y su hija Rocío Ralda Villadeleón, quienes fueron nombrados como Mensajeros de la Paz por su aporte a la cultura del país. La actividad se efectuó en el Patio de la Paz del Palacio Nacional de la Cultura, al cual asistió el Viceministro de Patrimonio Cultural y Natural, Juan Alberto Monzón Esquivel, y los arqueólogos encargados del sitio, Christa Schieber de Lavarreda y Miguel Orrego Corzo.
El titular de la cartera expresó su agradecimiento a la familia Ralda. “Quiero exaltar la labor de tres generaciones de la familia Ralda que le rinden tributo a nuestra identidad cultural”, señaló el Ministro. El encomio estuvo a cargo de Schieber de Lavarreda. Durante su intervención hizo un breve repaso sobre la historia reciente del sitio, desde que iniciaron las excavaciones hasta que inició el proyecto de donación.
En 2002, el sitio fue declarado Patrimonio Cultural de la Nación. En 2007 José Luis Ralda y su hija Rocío Ralda, continuaron con la donación de terrenos para fortalecer la investigación, preservación y atención a turistas. En esta última fracción de terreno se construye el museo El Caracol del Tiempo, aún pendiente de concluir. Según el Ministro Chea Urruela, se estima que para finalizar el proyecto hace falta alrededor de Q6 millones.
De acuerdo a José Luis Ralda, la donación de su familia al Estado de Guatemala es de alrededor de 22 manzanas. A la fecha más de 700 personas dependen del trabajo que les brinda el Ministerio de Cultura y Deportes, a través del parque arqueológico Tak’alik Ab’aj.