Los guatemaltecos, en especial los nacidos en Quetzaltenango, identifican la canción “Luna de Xelajú” como “el segundo himno de Guatemala”. La popularidad de este tema hizo de su autor, Paco Pérez, uno de los más conocidos e inolvidables nombres artísticos del país. Aunque hay debates sobre el año de su natalicio, los documentos históricos señalan que el cantautor nació en Cuilco, Huehuetenango, el 25 de abril de 1917, por lo que estaría cumpliendo 99 años.
La inspiración para su más famosa composición, no fue casualidad. Francisco Pérez Muñoz, como fue bautizado, creció en Quetzaltenango. Debutó como cantante en el Teatro Municipal de esa ciudad. Más tarde se unió a los también cantantes Manolo Rosales y José Luis Álvarez, para formar el “Trío Quetzaltecos”.
En 1944 ya era solista y fue en ese año en el que se dio a conocer “Luna de Xelajú”. Otras de sus composiciones fueron “Chichicastenango”, “Arrepentimiento”, “Nenita” y “Patoja linda”. Pero Paco Pérez no fue famoso solo por la música. La actuación fue otro de los dones que cultivó. En la Radio Nacional TGW, era popular por “Ciriaco”, el personaje al que daba vida. Incursionó también en el cine con un papel en la cinta “El Sombrerón” y en el teatro en la obra “Un loteriazo en plena crisis”.
Paco Pérez fue uno de los artistas que falleció en el accidente aéreo ocurrido el 27 de octubre de 1951. Vivió solo 34 años, pero su legado lo hizo inmortal en la memoria de los guatemaltecos. El Ministerio de Cultura y Deportes se une al tributo a esta gloria del occidente del país.